• Español
  • Русский
  • Menu
    Cocina con isla: particularidades y distribución

          Si eres de los que buscan individualidad en su cocina y necesitas una solución original y a la moda, una cocina con isla es para ti. La cocina a medida con isla no es solo una tendencia moderna, sino también una solución funcional y elegante para un interior contemporáneo. Por “isla” se entiende un módulo independiente ubicado en el centro de la cocina. Puede servir como superficie de trabajo, zona de comedor, espacio de almacenamiento, o incluso incluir la placa de cocción y el fregadero. Este tipo de distribución combina estética, comodidad y la máxima ergonomía. En este artículo te contaremos por qué las cocinas con isla son cada vez más populares y cómo diseñar una que se adapte perfectamente a tus necesidades.

    ¿Qué es una isla de cocina?

          Una isla de cocina es un módulo independiente que se coloca en el suelo, compuesto por armarios bajos, cajones y una encimera. Se encuentra separado del resto del mobiliario de cocina.

          Existen dos tipos principales de islas, según su construcción: las fijas y las móviles. Estas últimas son menos comunes y se utilizan principalmente para una zonificación flexible del espacio y suelen tener dimensiones más reducidas.

          También cabe mencionar las “penínsulas”: en este caso, el módulo está conectado por un lado al mueble principal, colocado perpendicularmente. Esta solución permite dividir el espacio en dos zonas diferenciadas y resulta especialmente útil en cocinas alargadas.

          La isla no es solo un elemento decorativo, sino también una parte funcional del diseño. Ayuda a organizar mejor el espacio, separar la zona de comedor del área de trabajo, y puede complementar perfectamente una cocina en línea o en forma de “L”.

          Si no se desea complicar el diseño con instalaciones, la isla puede servir como mesa adicional, ya sea de trabajo o comedor. Pero si se apuesta por una solución más avanzada, se puede integrar un fregadero o una placa de cocción, e incluso electrodomésticos como un horno o una mini nevera. También son posibles las soluciones mixtas: por ejemplo, usar un lado como área de trabajo y el otro como comedor, acompañado de taburetes altos o medios, según la altura del módulo.

    ¿Qué es una isla de cocina?

    Ventajas y desventajas de las cocinas con isla.

          Ergonomía. Una isla facilita la implementación de la “regla del triángulo de trabajo”, permitiendo ubicar el fregadero, la placa de cocción y el frigorífico a una distancia ideal de 1000–1500 mm entre sí.

          Funcionalidad. La principal ventaja de la isla es que tiene cuatro lados disponibles, lo que permite aprovechar el espacio bajo la encimera como zonas de almacenamiento adicionales con cajones de distintos tamaños, y utilizar la superficie tanto para cocinar como para comer.

          Zonificación del espacio. La distribución con isla ayuda a separar la zona de cocción del comedor o incluso dividir la cocina del salón.

          Comodidad. Mientras cocinas, no tendrás que mirar a la pared: podrás conversar cara a cara o ver la televisión.

          Estética. En espacios grandes, la isla se ve como un elemento funcional original y sofisticado.

          Pero también existen desventajas:

          Ausencia de salpicadero. Si instalas una placa de cocción en la isla, los salpicones son inevitables, lo que requerirá más esfuerzo en la limpieza.

          Necesidad de instalaciones adicionales. Si planeas colocar el fregadero o la placa en la isla, es imprescindible contar con acometidas de agua, gas o electricidad, lo que no siempre es posible — especialmente para el desagüe.

           Espacio. La isla requiere una estancia amplia. No solo ocupa espacio por sí misma, sino que debe contar con suficiente zona alrededor para poder moverse y abrir cómodamente las puertas de los armarios. Los especialistas recomiendan este tipo de cocina en áreas de al menos 20 m².

          Precio. Una cocina con isla suele tener un coste más elevado, especialmente por la instalación de nuevas acometidas. Sin embargo, si valoras el confort y la personalización, es una inversión que vale cada euro.

    Ventajas y desventajas de las cocinas con isla.

    Reglas para la instalación de una isla de cocina.

           La cocina con isla es adecuada para espacios amplios, preferiblemente de forma cuadrada o rectangular (pero no demasiado alargada). La superficie ideal comienza a partir de los 20 m², siendo el mínimo recomendado entre 15 y 17 m². El módulo de isla debe instalarse a una distancia de al menos 1–1,2 metros del mueble principal. Si esta distancia es menor, será incómodo abrir cajones y puertas, ya que no habrá espacio libre suficiente.

          Las dimensiones del módulo isla se determinan de forma individual. La altura suele coincidir con la del resto de la cocina, normalmente entre 80 y 100 cm, dependiendo de la altura del usuario. La medida media es de 90 cm. La longitud se adapta al diseño, siendo lo habitual unos 180 cm o más, lo que permite utilizar la superficie como una encimera completa.

          Dentro de la isla se pueden incorporar zonas de almacenamiento y electrodomésticos integrados. El tamaño estándar de los módulos suele ser de 60 cm. Si se desea instalar un frigorífico, congelador o lavavajillas, es importante prever con antelación las medidas necesarias para los nichos.

          La profundidad estándar de los módulos es de 60 cm, pero en una isla esta medida puede no ser tan práctica, ya que una de las caras quedará inutilizada. Si la isla combina una zona de trabajo por un lado y una barra por el otro, se recomienda prolongar la encimera para dejar espacio a los pies debajo del voladizo.

          Si el principal objetivo de la isla es ofrecer almacenamiento, la profundidad debe ser de al menos 90 cm. Una isla de mayor tamaño permite incorporar armarios y cajones en ambos lados, maximizando así la funcionalidad del espacio.

    Reglas para la instalación de una isla de cocina.

    ¿Cómo ubicar una isla de cocina en relación con el resto del mobiliario?

          Las cocinas con isla pueden variar no solo en el tamaño y diseño del módulo independiente, sino también en la disposición general del espacio. Pueden integrarse en casi cualquier tipo de distribución, siempre que la superficie del ambiente lo permita. Veamos qué opciones existen para distintos tipos de cocinas:

          Cocinas lineales: Aquellas donde el mobiliario se encuentra alineado a lo largo de una sola pared. Este tipo de distribución ofrece la mayor libertad de diseño. Aquí se puede instalar una isla del tamaño que se desee y ubicarla tanto en el centro de la habitación como ligeramente desplazada. La forma del módulo también puede ser rectangular, cuadrada o incluso curva, dependiendo del espacio disponible y del gusto personal.

          Cocinas en esquina o en forma de L: Son las más populares y versátiles, adaptándose bien a diferentes formas de estancia. Para mantener la armonía visual, es importante calcular correctamente las dimensiones del módulo. Se recomienda que el conjunto forme un rectángulo simétrico, y que la isla se coloque hacia el ángulo libre de la distribución.

    Cómo ubicar una isla de cocina en relación con el resto del mobiliario

          Cocinas en forma de U: Integrar una isla en este tipo de cocinas puede ser más complejo, ya que suelen ocupar mucho espacio y ofrecen ya suficiente capacidad de almacenamiento y espacio para electrodomésticos. No obstante, si se desea añadir una isla, lo ideal es optar por un módulo cuadrado ubicado en el centro. En este caso, puede funcionar como zona de comedor y combinarse perfectamente con taburetes altos o sillas tipo bar.

    La iluminación de la isla.

          Al planificar una isla de cocina, no se debe olvidar la iluminación. La iluminación de una isla de cocina desempeña un papel clave tanto en la comodidad como en el estilo del espacio. Para que la luz sea funcional y al mismo tiempo destaque el diseño interior, es importante seguir algunos consejos. En primer lugar, las lámparas colgantes son la elección ideal: proporcionan luz dirigida y crean un punto focal sobre la isla. La altura óptima de instalación es entre 70 y 90 cm desde la encimera, para evitar deslumbramientos y permitir libertad de movimiento.
          En segundo lugar, la cantidad y potencia de las luminarias dependerá del tamaño de la isla: una lámpara puede ser suficiente para una isla pequeña, pero para una más larga se recomiendan dos o tres. También es importante optar por luz blanca neutra (4000K), que ofrece una reproducción natural del color de los alimentos.
          Además, se puede incorporar iluminación LED en la parte inferior de la isla o en elementos suspendidos, aportando un ambiente acogedor y luz suave por la noche.

    la iluminacion la isla de cocina

          Si quieres encargar una cocina a medida en Benidorm, Calpe, Dénia o Alicante, pero todos estos detalles te hacen dar vueltas la cabeza, hay una solución más sencilla: acudir a especialistas como Proyectos Alfa Interiorismo. Un asesor de la empresa visitará tu espacio y te dará recomendaciones sobre cómo aprovecharlo al máximo y dónde ubicar correctamente la isla. Además, el diseñador te ayudará a elaborar un proyecto de tu cocina a medida personalizada, cuidando cada detalle que hará que tu cocina sea no solo única, sino también cómoda y funcional.

    OBTENER PRESUPUESTO!

    Pide la visita gratuita de un técnico de medición el mismo día que lo solicita

    © 2025 ALL RIGHT RESERVED
    Close